En general, el seguro funciona distribuyendo el costo de riesgos inesperados entre un gran número de personas en la misma región que comparten riesgos similares.
Cuando se contrata una póliza de seguro, se paga una prima mensual o anual. Ese dinero se suma a las primas de muchos miles de otros asegurados y entra en un gran fondo común que la compañía de seguros utiliza para el pago de reclamaciones, de gastos y para dar utilidad a sus accionistas.
10 pasos para elegir un buen seguro
Con un poco de suerte, nunca necesitarás verte en el grupo de personas afectadas por algún tipo de riesgo o eventualidad, pero, si resulta que desafortunadamente llegas a estarlo por una calamidad inesperada, tal vez debido a enfermedad, fallecimiento, un clima severo o un accidente, el fondo común de primas se usará para ayudarte a minimizar el impacto financiero resultante hasta el límite que hayas seleccionado en tu póliza.
Si las cosas salen mal, tu aseguradora puede reparar o reemplazar los artículos que se hayan perdido o dañado, según los términos de la póliza. También puedes tener la opción de recibir una liquidación en efectivo por la cantidad de dinero acordada.
Diariamente, las noticias ofrecen historias de panameños que se han visto atrapados en eventos que a menudo están fuera de su control, perdieron sus hogares o sus automóviles, se lesionaron en accidentes o se vieron envueltos en desastres, sea dentro o fuera de Panamá.
Es natural preguntarse qué haría uno si estuviera en la misma situación. ¿Podría recuperarse financieramente sin un seguro?
Claro, el riesgo de que estas cosas te pasen puede parecer pequeño. Pero, si sucedieran, el impacto que podrían tener en tus finanzas, tu estilo de vida y, potencialmente, en tu futuro, podría ser enorme.
El significado real del seguro se comprende cuando ocurren daños o pérdidas, momento en el que es menos probable que puedas permitirte pagar el costo total de la pérdida por tu propia cuenta, lo que podría dejarte en una crisis financiera.
Ya sea que te preocupes por todo o que seas un optimista incansable, o incluso una persona organizada que planea cada detalle, o quizás alguien que esté feliz de seguir la corriente, comprar una póliza de seguro (que ojalá nunca tengas que usar) traerá consigo algo que no tiene precio: «TRANQUILIDAD MENTAL».
Contratar un seguro significa que tú no enfrentarás los riesgos inesperados solo.
Nuestras recomendaciones te permitirán elegir el mejor seguro para que tengas una mayor capacidad de reacción y así no te desestabilices ante los imprevistos.